Ellos son Mumu y Chava y decidieron aventurarse a casarse en palma sola, Michoacan.
Un lugar donde ocurre lo inesperado, donde las fuerzas invisibles de la naturaleza se unen en armonía
para crear un camino de paz y tranquilidad, olvidando todo lo que existe en el mundo exterior,
un lugar donde uno se encuentra privado de toda comunicación, sin señal telefónica, ni Internet, ni televisión.
Esto es tan solo la primera parte de la historia de ese gran día, donde Chava y Mumu llegaron a tocar a
mi puerta a las 6am con una energía nunca antes vista, su amor radiaba mientras los retrataba,
recuerdo que las olas se desbordaban con locura, había algo especial en ese día.