Era un día muy cálido y lleno de armonía, lo pude sentir desde el momento que amaneció, o quizás haya sido toda esa buena vibra que transmitían Guillaume y Barbara, su historia que estoy por mostrarles fue magnífica, fue un evento con los seres queridos mas cercanos, donde todo sentimiento se siente tan real y se proyecta de una manera tan natural, donde los abrazos dados se sienten hasta lo mas profundo de tu alma y las sonrisas prolongan la alegría de este día, donde la temperatura de la fiesta va aumentando paulatinamente hasta alcanzar un gran nivel de locura e integración, justamente del tipo de evento que mas me gusta documentar, la atmósfera se sentía llena de amor y cariño.
Llegar a conocer a Guillaume y a Barbara fue un verdadero privilegio, demostrándome que en nuestros corazones hay que tener coraje para seguir nuestros sueños, que el amor todo lo puede unir, personas con una gran belleza en sus corazones.
Agradezco a Sillon Rojo quienes me acompañaron y me invitaron a ser parte de este gran evento.